Pintando las trincheras.

"Trincheras de ideas valen más que trincheras de piedra". José Martí

sábado, 10 de abril de 2010

Soy cirujan@ y quiero operar (primera entrega)

Se levantó temprano y vio con alivio que no llovía. Podría operar. Porque cuando llovía el quirófano se inundaba y había que posponer.
Era cirujan@ y quería operar.
Al llegar al hospital se abrió paso entre la muchedumbre que se agolpaba en los pasillos.
Se encontró con la enfermera de la habitación 202 y le preguntó si habían llevado ya al paciente al quirófano.
La enfermera le dijo que el camillero estaba todavía con el paciente de la 201 en la sala de rayos porque al aparato había que apagarlo a cada rato para que no se quemara.
Fue en persona a la habitación 202 y encontró a su paciente con los ojos muy abiertos.
Con una expresión de súplica o de rabia o de incertidumbre o de….nada.
Sabía que no le correspondía pero tomó una camilla y con mucha dificultad sacó al paciente de la cama. Y empujó el carrito hasta el quirófano. Era cirujan@ y quería operar.
Al llegar volvió a esforzarse para depositar al paciente en la mesa de operaciones.
Fue hasta la mesa con los legajos y sacó el del paciente 202. No había diagnóstico porque no le pudieron sacar la tomografía ya que el tomógrafo no funcionaba y los parientes del paciente no habían querido o podido pagar la ambulancia privada que lo llevara a otro nosocomio. Es que la ambulancia del hospital quebró el eje la semana pasada y la iban arreglar para ésta, pero no se consigue el repuesto y quizás la semana que viene…

Por los síntomas había un cáncer por alguna parte y decía el legajo que si no era operado de inmediato podría no pasar la noche. Usaría su intuición. Porque era cirujan@ y quería operar
Se acercó al interno y llamó a jefatura y lo atendió un auxiliar diciendo que por allí no había nadie. Le preguntó si no sabía por donde andaba el anestesista. El auxiliar recordó que había escuchado que el anestesista había cambiado el día. Ahora venía los lunes porque como estaba con un contrato precario había conseguido unas suplencias en una clínica privada. Cortó.
Lamentó lo del anestesista. Igual no podía postergar para el lunes porque ese día el quirófano se usaba como sala de vacunación ya que el lugar donde se vacunaba estaba remodelándose desde hacía dos meses, pero todo se había detenido por una irregularidad en la licitación o algo así.
Tomó una decisión Sabía que no le correspondía y que era algo peligroso, pero había estudiado lo suficiente para preparar un poco de anestesia teniendo en cuenta que si se le iba la mano el paciente de la habitación 202 estaría en grave peligro. No pensó en las consecuencias propias porque era cirujan@ y quería operar.
Resultó. El paciente dejó de mirarlo con esos ojos de susto, resignación, miedo, agradecimiento o…nada y se durmió bajo la mascarilla.
Primer paso logrado. Buscó los instrumentos y los encontró sucios en la bandeja. Restos de sangre de otra intervención y demás. Sabía que no era de su competencia, pero aseó cuidadosamente los instrumentos hasta dejarlos relucientes.
Sí, era cirujan@ y quería operar.
Recién ahí miró alrededor y vio que solamente estaba con su paciente de la habitación 202… dormido.
Su primer asistente no estaba. No necesitaba preguntar. Usaba todos los artículos posibles de sus licencias. Tampoco estaba su asistente 2 pero recordó que le había avisado que iba a reclamar a liquidaciones porque no le pagaban desde hacía seis meses.
Se sacó guantes y barbijo y abandonando el quirófano se dirigió a paso de marcha militar hasta la oficina del director. La secretaria le dijo que no lo podría atender porque el Ministerio le había encargado la organización del Primer Encuentro Internacional de las Nuevas Tecnologías de Punta en Medicina. Como insistió le mostró la fila donde había veinte personas que traían una queja diferente.
Con resignación volvió al quirófano. No podía dejar de pensar que era cirujan@ y quería operar. Grande fue su sorpresa cuando encontró a su paciente despierto y sentado en la camilla. Por temor a dañarlo había preparado insuficiente anestesia. Había sido una suerte que no empezara a operar. El paciente le estaba diciendo con una terrible carga de angustia: “Sáqueme de aquí… por favor”
No podía más que rendirse a la cruda realidad. Llamó por el interno al camillero para que lo viniera a buscar pero la enfermera le informó que ahora había llevado al paciente de la 201 a traumatología porque en rayos de tanto amontonarse camillas varias chocaron entre sí y el paciente se había roto el… Cortó.
Sabía que no le correspondía pero se dispuso a empujar la camilla hasta la habitación 202. Apenas salió al pasillo lo rodearon los parientes preguntándole como había salido la operación. Los miró con tristeza. Ellos lo miraron con irritación. Se dispuso a decir la verdad, no iba a cubrir a nadie. Pero apenas pronunció: “no pudo operarlo porque“, uno de los parientes, el más grandote gritó USTED ES CIJUJAN@ y TIENE QUE OPERAR. Y una catarata de palabras que no merece ser registrada fue lanzada como dardos. Pero cuando la esposa del paciente de la habitación 202 quiso arrojar un matafuego que arrancó de la pared no le dieron los pies para poner distancia y ganar el jardín del hospital. Detrás, la media docena de parientes que dejó abandonada la camilla en el pasillo.
La falta de personal de mantenimiento fue la salvación. El pasto estaba tan crecido que pudo zambullirse contra la tierra y quedó bajo los yuyos y los espinos, y sobre el barro producido por el regador que se había disparado solo y anegado el jardín,
La horda de parientes pasó de largo y se perdió en la inmensidad del hospital.
Con las manos rasguñadas, el guardapolvo embarrado y varios moretones en el cuerpo levantó la cabeza por sobre los yuyos. Y mientras trataba de incorporarse con mucha dificultad se miró a sí mismo y se preguntó si realmente era cirujan@ y si de ahora en más querría operar.(continuará)

Cualquier semejante con otras realidades no son casualidad.
Juan Pedro Mc Loughlin

2 comentarios:

  1. Qué lamentable parecido con la realidad de todos los días!!!
    Hermosa tu primera entrega...esperaré la continuación.
    (¿Por qué no abrís un blog en Clarín,que lo lee más gente?-Yo lo abandoné-)

    ResponderEliminar
  2. QUÉ REALIDAD TAN SEMENJANTE Y TRISTE

    ResponderEliminar