Como todos los términos que se ponen de moda uno tiene reparo en meterse con ellos. Porque se teme ser descalificado. ¡Cómo vas a estar en contra de la inclusión en la escuela!
Sí, estoy en contra de esta inclusión que excluye.
Excluye al chico que es incluido en el lugar equivocado porque no recibe la atención que le garantizan los derechos del niño.
Excluye a los compañeros que no pueden entrar en "tarea" porque hay un chico que está todo el tiempo tratando de decirle a los adultos : "Déjenme estar donde me puedan ayudar de verdad"
Excluye al docente que no puede enseñar porque tiene en el grupo uno o dos alumnos que boicotean constantemente la "tarea" porque no pueden asumirla.
Excluye a los equipos de orientación que indican cambios de modalidad para ese alumno y no ven reflejado su trabajo profesional por un absurdo "los padres deciden si el chico pasa o no pasa a escuela de recuperación o especial" (toda la legislación escolar dice lo contrario, que los padres deben acatar las decisiones de la escuela y los equipos profesionales. En ningún lado dice que un padre, cuya opoinión es subjetiva, puede desconocer la decisión de las autoridades docentes)
Y así estamos, con padres que atropellan, chicos que revolean bancos y sillas y docentes que se esconden abajo de los escritorios para evitar terminar en el hospital.
Estoy en contra de esta inclusión que excluye. Porque es mentirosa. Porque es peligrosa. Y porque no tiene asidero en ningún principio pedagógico, humano , legal y del sentido común.
Estoy de acuerdo con lo expone y lo he he podido verificar en mi propia experiencia como padre, como profesor y como alumno. "Alguien" ha generado un modelo de excluido que debe ser incluido forzosamente en la escuela. Con ello se excluye a muchos que pueden ser, con perdón de la expresión, "incluibles". Existe el marginado oficial para el sistema educativo, que básicamente responde a una imagen de un sujeto difícil de integrar socialmente. Existe otro marginado, subproducto de la clasificación brindada por los sociólogos que "no se ve". Ello torna destructivo al sistema educativo.
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